Querida feminista.
Este es mi más noble intento de ser yo, o de defender mi derecho a ser yo en mente , espíritu y cuerpo.
Porque eso soy, soy mente y espíritu en un cuerpo lleno de testosterona, de serotonina, de adrenalina.
Soy una biología formidable de la cual me enorgullezco, y no tengo razón alguna para avergonzarme.
Soy una biología formidable de la cual me enorgullezco, y no tengo razón alguna para avergonzarme.